El enfoque de la innovación en la administración pública ha de ser algo distinto al que se suele exponer en las escuelas de negocio sobre innovación. En este caso, la innovación obtendría resultados de mejora de los servicios ofrecidos a la ciudadanía. Pero para ello, hay que medir esos servicios.
Por supuesto, esta innovación también está guiada por metodologías y enfoques con carácter multinivel que pueden aplicarse en cualquier ámbito de las administraciones públicas.
Partiremos de la base de que la innovación puede darse en 3 formas:
- Mejorando un proceso/práctica
- Adaptándolo a un nuevo contexto
- Creando un nuevo proceso/práctica
En cualquiera de los tres casos, mejorar, adaptar o crear no es válido porque sí: recordemos el concepto de mejorar la calidad de los servicios ofrecidos a la ciudadanía.
Sin embargo, la innovación debe apartarse del concepto mejora. Por eso, es complejo aplicarla en la administración pública, ya que cuando se trata de procedimientos administrativos, al estar estos muy detallados, la innovación puede darse en aspectos muy concretos.
Por tanto, llegar a realizar e implantar creaciones nuevas y disruptivas no será siempre posible, pero esto no supone que no se esté realizando innovación. Para poder llegar a este punto es necesario aplicar correctamente metodologías específicas que permitan cumplir el ciclo de creación de ideas, aplicación de ideas, mejora de servicio.
Este artículo trata de exponer algunas de las metodologías ya aplicadas con éxito en las administraciones públicas. Estas por sí solas, sin un plan de trabajo, una orientación a objetivos y una idea específica de lo que queremos trabajar, no tendrán un resultado óptimo.
Innovación abierta
La innovación abierta está relacionada con la inclusividad y la apertura de los procesos a la sociedad. Hace referencia a la ampliación del uso de recursos de conocimiento externos en el entorno de la organización.
Se incorpora a la gestión pública a través de procesos de co-creación en los que se involucra a todas aquellas personas y organizaciones del ecosistema de innovación (empleados del sector público, del sector privado, del mundo académico y ciudadanía en general).
Co-creación
Según la definición de Bovaird y Loeffler (2012), la co-creación es el cambio de perspectiva sobre la ciudadanía como actor pasivo (receptor de los servicios) o activo (implicado en su diseño, implementación y/o evaluación), en el contexto de un servicio público que representa el interés público y no los intereses de personas “consumidoras” de servicios públicos.
Los procesos de co-creación ponen el acento en las aportaciones de la ciudadanía en el proceso de prestación del servicio, a través de investigaciones cualitativas o talleres sobre soluciones concretas.
Concursos de ideas
Mediante concursos de ideas, la innovación abierta puede convertir a la administración en una aceleradora de ideas innovadoras y aprovechar el talento y la experiencia interna y externa. Estos concursos de ideas pueden crearse por la necesidad de resolver un reto o problema de la administración, pueden fomentar un ecosistema de innovación en el ámbito público o ser enfocados a soluciones tecnológicas.
Colaboración en red
Se trata de utilizar todo el activo existente en términos de conocimiento, creatividad, recursos o capacidades transformadoras en los procesos de innovación. Se basa en las interacciones que múltiples agentes mantienen entre sí cuando comparten su talento y su conocimiento de forma abierta y transparente.
Esta lógica de trabajo en red puede permitir un análisis objetivo de riesgos y beneficios de las soluciones innovadoras, potenciando la selección de las más idóneas para cada contexto.
Ciencias del comportamiento
Consiste en hacer uso de conocimientos de la psicología y las ciencias conductuales con un enfoque en la microperspectiva del comportamiento individual, las actitudes y los procesos psicológicos asociados a personas o grupos (James et al., 2017) para realizar predicciones y posteriormente testearlas en proyectos piloto. De esta forma se demuestra la eficacia de la aplicación de las ciencias conductuales en ámbitos como la transparencia, la retroalimentación con la ciudadanía, la satisfacción ciudadana con los servicios, el acceso a determinados servicios y el pago de impuestos.
Experimentación
Parte fundamental e indispensable para la innovación. La experimentación se trata de un proceso de aprendizaje en el que se recoge información necesaria para reducir al mínimo el nivel de incertidumbre inherente a cualquier proceso de innovación. Los datos recogidos nos permiten validar o no las hipótesis antes de un despliegue de las acciones, cuyo impacto podría ser considerable y tener consecuencias importantes sobre la ciudadanía.
Ciencia de datos
El uso de la ciencia de datos en la administración puede abarcar prácticamente todos los sectores desde el sector de la salud, educación, transporte, vivienda, inclusión social, hasta defensa, política fiscal, seguridad, etc, también todos los niveles de gobierno. Consiste en obtener información útil y aplicable a partir de una cantidad de datos, utilizando métodos científicos.
La ciencia de datos requiere disponer de datos que se puedan obtener automáticamente de los procesos que se realizan en la administración pública.
Simulación
Metodología para experimentar y explorar posibles escenarios en cuanto a una situación dada. En innovación pública, consiste en reproducir de manera artificial un desafío de la sociedad para poder experimentar soluciones de manera controlada. Anticipa los impactos de una decisión y crea escenarios tomando en cuenta las variables interrelacionadas.
Gestión ágil de la innovación
Forma de metodología ágil en la Administración Pública que habitualmente se encuentra en el ámbito privado de las empresas tecnológicas. Su función es atajar problemáticas recurrentes con sobrecostes, retrasos de implementación o excesos de dependencia de tecnología externa.
En el ámbito público existen iniciativas de adaptación al “agile” por parte de administraciones en diferentes niveles de gobierno como la promoción de enfoques de adquisición modular de tecnología y la creación de nuevas unidades internas independientes de reacción rápida para mejorar la adaptación de los gobiernos a los procesos tecnológicos.
Ampliación de información: https://redtransparenciayparticipacion.es/wp-content/uploads/2021/10/INNOVACION-PUBLICA-EN-EL-AMBITO-LOCAL.pdf
